Si exceptuamos algún autor reciente, poco es lo que conocemos acerca de los escritores en lengua portuguesa, poco de los del país vecino, pero menos aún de los autores más allá de los mares, entre ellos Brasil, patria de Machado de Assis. Sin embargo, es evidente que deberíamos acercarnos más a esa literatura hermana, conociéndola conoceremos mejor la nuestra, nos conoceremos más a nosotros mismos.
Se ha centrado Sandra en un aspecto muy poco estudiado aún en la literatura, las paremias, los pensamientos y expresiones sentenciosas que la pueblan.
Desde siempre los cuentos populares se han ido transmitiendo de boca en boca y a veces terminan reducidos a una mínima expresión fácil de recordar, píldoras de sabiduría popular. Esas píldoras, ese pensamiento concentrado en una frase, llega a los escritores que las toman y convierten en cultas narraciones breves, dejándonos a su vez otras sabias frases que concentran su pensamiento.
Sandra ha escogido esos cuentos, que abarcan tanto la etapa romántica como la realista, para estudiar en ellos las frases sentenciosas que suman largamente más de doscientas. Algunas de esas sentencias vienen de lejos, otras, las más, son creaciones del autor que nacen con la vocación de perdurar.
Cierra su exposición Sandra con dos de esas citas que reproducimos aquí:
El Corcovado por Aurélio de Figueiredo (1903) |
Nem Corcovados, nem Himalaias, valem muita coisa ao pé da tua cabeça, que os mede.
O grau do espírito que nos deleita dá a medida exacta do grau de espírito que possuimos.